El pasado miércoles 22 de mayo, los alumnos de 1º de Bachillerato junto con su profesor de filosofía fueron invitados por el fotógrafo y artista Miguel Sebastián a visitar la exposición fotográfica, expuesta en la sala Lapayese de Calamocha y que lleva por título: “Tierras varadas“. Además nos dio una charla sobre “educar la mirada”. Aprovecho este espacio para manifestar mi agradecimiento al artista por su invitación a una actividad que resultó ser formativa y hermosa.
El propio autor de la exposición solicitó al profesor acompañante que preguntase a los alumnos asistentes, qué les había parecido la charla y la exposición, si algo les había llamado la atención, si habían aprendido algo, etc. Un resumen del parecer del alumnado sobre esta actividad es lo que a continuación me dispongo a narrar.
Unos pocos alumnos manifestaron no haber aprendido nada y consideraron aburrida y monótona la charla, pese a que algunas de las fotos expuestas sí les habían gustado. Otros, en cambio, sí que se sintieron atraídos por el contenido de la charla y por algunas ideas que en ella se lanzaron.
Dejo constancia a continuación de esas ideas e impresiones que dieron que pensar a los alumnos:
La idea de “educar la mirada” es importante hoy día, y ya que vivimos en una cultura eminentemente visual, es importante saber y comprender lo que hay detrás de una imagen.
El mensaje de que es importante fijarte en las cosas, valorar los pequeños detalles y observar las cosas de tú alrededor, me hizo ser consciente –manifiesta un alumno- de que yo no lo hago, no me fijo en nada y no valoro mi alrededor. Por esa razón, la reflexión sobre “educar la mirada” me pareció interesante
Otros manifestaron que les gustó cómo juega el autor con las luces y las sombras, los momentos que capta, etc.
La afirmación de que “somos lo que recordamos” me impresionó mucho -dijo otro-, por eso me resultó interesante lo que dijo de los recuerdos visuales de cuando somos pequeños.
Algún alumno, aficionado a la fotografía, manifestó haberse sentido identificado con el contenido de la charla, pues la fotografía ayuda a desarrollar la empatía y es un medio para expresar la historia de lo que cada uno vive.
Otros manifestaron haberles llamado la atención el que haya gente que sepa ver la belleza en lo cotidiano y rutinario, o también la idea de que no es la belleza de una foto lo que verdaderamente importa sino lo que hay detrás, el mensaje que tiene cada foto y que algunas conmueven por su forma de ver los momentos de la vida y por la nostalgia hacia su infancia que en ellas se sugiere.