El día 7 de noviembre de 2019 los alumnos de 4ª de ESO nos dirigimos a el Real Monasterio de Santa María de Veruela y , además, a la preciosa ciudad de Tarazona junto a nuestros profesores Fernando García y María Dolores Gómez.
Salimos de instituto a las 8:45 y realizamos un descanso tras una hora y media de viaje para almorzar. Poco Después llegamos al primer destino. El monasterio de Veruela nos recibió con lluvia, pero eso no nos quitó la posibilidad de disfrutar de su visita.
La visita fue dirigida por un guía que nos enseñó el lugar de una forma bastante creativa que se basaba en vestir a algunos alumnos de monjes de la época medieval. De esta manera nos enseñó la cocina, el refectorio, sala capitular, patio e iglesia; además de explicarnos como era el día a día del monasterio.
Una vez terminada la visita al monasterio tuvimos la oportunidad de poder ver junto a él un museo dedicado al vino, ya que estábamos en el campo de Borja. Tuvimos la posibilidad de visitarlo con total libertad y a nuestro antojo. Tenía zonas dedicadas desde los aromas hasta el mismo crecimiento de la planta.
Después de ver el monasterio y el museo, nos dirigimos a la ciudad de Tarazona, donde los profesores nos permitieron disfrutar de una hora y media de tiempo libre para usarla a nuestro placer por la ciudad. A la hora que nos dijeron nos reencontramos en la puerta de la Catedral de Santa María de la Huerta y nos dividimos en dos grupos, uno dirigido para ver la Catedral y el otro para ver zonas históricas de la ciudad.
En la visita a la catedral disfrutamos de las principales zonas junto a una guía, la cual, nos realizó un pequeño juego para identificar decoraciones y estilos arquitectónicos. A demás nos explicó alguna curiosidad como, por ejemplo, los grandes problemas que presentaba el cimborrio mudéjar; era demasiado pesado para la estructura de la misma.
En la visita a la ciudad tuvimos la suerte de ver el ayuntamiento donde nos explicaron, también, una de las grandes tradiciones de las fiestas de la zona como es el cipotegato. Luego nos dirigimos a la morería, judería, palacio episcopal y finalmente la antigua plaza de toros compuesta por grupos de pisos formando un octógono.
Ya de vuelta a casa terminamos una excursión entretenida, gracias a la cual, pudimos aprender bastante, y aunque el tiempo no acompañase, lo pasamos bastante bien.
Marcos Popa – 4 ªESO B